Jesucristo es una personalidad tan grande, que para algunos es el
Hijo de Dios, mientras que para otros creen que es Dios mismo. Muchos creen que
fue una encarnación de Dios y hay muchos que opinan que fue uno de los más
grandes profetas que el Todopoderoso envió a la Tierra para nuestra
salvación. Hay muchos pecadores en este mundo que creen que vino para salvarnos
de los castigos. Y mucha gente de bien opina que Jesucristo vino para
mostrarnos el camino recto. El resultado es que Jesús está en boca de todos, ya
sean cristianos o no. Pero realmente ¿que conocemos de Jesús de Nazaret, el
hombre, el judío de la
Palestina del Siglo I?, prácticamente nada o casi nada.
Lo que con certeza sabemos es a partir de su bautismo por Juan el Evangelista, sus tres años de ministerio y su muerte, pero lo que pasó sobre el
nacimiento, infancia, vida y resurrección es algo que muchos aventuran a
escribir pero que históricamente es imposible demostrar.
Conocemos la vida de Jesús a través de los textos evangélicos pero
todos sabemos que fueron escritos como muy temprano 80 años después de la
muerte de este, es decir, habían pasado tantos años que de su vida oculta no
queda ningún testimonio fiable, entre otras razones por que no se empezaron a
recoger noticias sobre él hasta que se afianzó su culto como persona divina y
trascendental para la salvación de la humanidad.
Ninguno de los evangelistas conoció a Jesús por lo tanto los
textos fueron escritos a través de tradición oral por lo que es normal que
leamos contradicciones entre ambos y falsedades históricas.
Es como si ahora cogemos a alumnos de un colegio cualquiera y les
decimos que escriban sobre la historia de Franco, sin utilizar periódicos ni
Internet, solo, a través de lo que les cuenten sus padres y abuelos, probablemente
saquemos tantas historias distintas como oradores ya que encontraremos
retractores y seguidores; algunas verdades y con toda probabilidad muchas
leyendas; pues esto es lo que pasa con los Evangelios sobre todo con los
canónicos, Mateo, Marcos, Lucas y Juan (todos ellos romanos de origen griego,
no judíos) y que pese a quien le pese son leyendas mitificadas con el fin de
exaltar la divinidad del Hijo de Dios y por lo tanto fueron escritos como
“propaganda de una fe”, la fe cristiana.
* Jesús nació
antes que Cristo:
Lucas y Mateo dicen que Jesús nació siendo rey Herodes el Grande,
y sabemos con absoluta seguridad que Herodes murió el S. IV a.c, por lo tanto Jesús nació antes de Cristo.
Es decir, que naciera probablemente entre cuatro o seis años antes del
año I o era cristiana. Fue un monje llamado Dionisio en el S.V quien cometió un
error de cálculo. Por la tanto, Jesús tendría entre 36 y 39 años cuando murió
en la cruz.
* ¿Por qué
celebramos el día 25 de diciembre como el nacimiento de Jesús?:
A partir del S. IV se ensalza el cristianismo como fe predominante
y como habían otras muchas religiones, cogieron figuras de dioses y fiestas
paganas, como la de el día 25, que es el día en el que el sol comienza a vencer
a las sombras, el “sol invicto” . El 25 de diciembre se impuso por razones
políticas ya que el emperador Constantino cogió esta festividad pagana romana
en la que se celebraba el acortamiento de las noches dando paso al alargamiento
de los días, es decir, la victoria del sol sobre las tinieblas; trasmutando así
por la “victoria del verdadero sol: Jesús”.
Judíos y musulmanes nunca aceptaron esta fecha ya que las
condiciones meteorológicas en Belén y comarcas durante los meses comprendidos
entre noviembre hasta marzo es imposible que ningún pastor sensato durmiera al
raso con su rebaño tal y como se
menciona en los evangelios.
Historiadores aventuran septiembre como mes probable para el
nacimiento de Jesús ya que sabemos que su primo Juan, el Evangelista nació seis
meses antes, en marzo
* Jesús nació en Belén o
en Nazaret?
Mateo
y Lucas nos dicen que Jesús nació en Belén, mientras que los otros dos, Marcos
y Juan dicen que nació en Nazaret.
Históricamente,
fue en este último. Sólo después, cuando se creyó firmemente que él era el
Mesías, se compuso la historia de su nacimiento, y se apuntó Belén, esta idea surgió de una tradición judía que
afirmaba que el Mesías nacería en Belén según la profecía de San Malaquías.
De
hecho como es conocido es como “Jesús de Nazaret” y no “Jesús de Belén”.
* ¿Nació en una posada o
en un pesebre?
Pues
ni una ni otra. Por aquellos días se promulgó un decreto del emperador César
Augusto por el que todos los habitantes del impero debían empadronarse, cada
cual en la ciudad de su estirpe. José y María se dirigían a Belén, en Judea, a 120 kilómetros de
Nazaret. Probablemente hicieron el viaje
en caravana con otros que seguían el
mismos camino, María se puso de parto, por lo cual se refugiaron en una cueva
donde dio a luz a su primogénito, inmediatamente fue llevado a un pesebre donde
se le pusieron paños y esperaron tres días hasta la recuperación de María.
En
ningún texto se mencionan bueyes y mulas.
Por
cierto, la tradición de “ El Belén”, es originario del S. XII, y su artífice
San Francisco de Asís, que se le ocurrió la genial idea de celebrar una misa de
Nochebuena escenificando en el altar una cueva, en la que dispuso animales
domésticos, un pesebre, paja y allí recostó una figura del niños Jesús juntos a
sus padres. La idea tuvo tanto éxito entre los franciscanos que la adaptaron a
las futuras celebraciones navideñas. Fue a partir del renacimiento
concretamente en Nápoles donde surge la idea de nacimientos y belenes tal y
como los conocemos en la actualidad.
* Los tres Reyes Magos
visitan al niño recién nacido:
En
ningún texto de la Biblia
se mencionan que fueran Reyes, solo
magos, que venía de la palabra persa “Mou”
y eran astrónomos; según el evangelio de Mateo seguía a una estrella.
Damos por hecho que eran
tres, pero en la Biblia
no se menciona el número, sólo habla de tres regalos: oro, incienso y mirra,
en consciencia, pensaron que debían ser tres.
En la Biblia tampoco se mencionan
sus nombres: Melchor, Gaspar y Baltasar. Estos surgen en el S. VI cuando
aparece un evangelio armenio en Francia y es el que da esos nombres, también
dice que eran tres hermanos que venían de oriente. Tampoco en ningún texto se
menciona que uno fuera negro, esto fue añadido en el Renacimiento, y se hizo
para que hubiera una representación de los tres grandes continentes que había
en la época: Europa (Melchor), Asia (Gaspar) y África (Baltasar).
Algunos creen que se
añadió la palabra “Reyes” para dar a entender que esos monarcas de religiones
paganas venían a rendir pleitesía al nuevo Rey portando regalos.
En algunos lugares se
habla de doce, correspondientes a las tribus de Israel, en otros lugares se
habla de dos y en otros de cuatro. Concretamente, en las
primeras pinturas que se conservan en iglesias del S. III aparecen solo dos, en
catacumbas del S. IV aparecen pinturas con cuatro. En el famoso mosaico de Rávena
aparecen en grupo y en lugar de llevar coronas (reyes) llevan gorros persas.
¿y qué pasó con ellos?
Pues, en uno de los primero textos apócrifos se menciona que Santo Tomás, que se
dedicó a evangelizar a todo bicho viviente tras la muerte de Jesús, se los
encontró ya muy ancianos y los convirtió al cristianismo.
En otros textos se dice
que sus huesos están enterrados en una catedral de Colonia. En la bandera de
este país hay tres estrellas que simbolizan que ellos descansan allí después de
que Federico Barbarroja, tras saquear Milán robase los huesos y acabaran allí.
En España sentimos gran
fervor popular por los reyes magos, pero, hay otro lugar donde su celebración
es tan fervorosa como aquí, y es en Etiopía.
Curiosamente, la idea que
tenemos de la llegada de lo reyes son de textos que en su día fueron condenados y perseguidos por la iglesia, todos textos apócrifos.
Hasta
aquí algunos hechos desconocidos sobre el nacimiento de Jesús, quizás, más
adelante hable sobre los pocos datos que hay sobre su infancia, años ocultos, condena y
posterior crucifixión, ¿que pensaban los judíos de él?y sobre todo que ocurrió
tras su muerte, eso sí, desde el punto de vista histórico, puesto que por todos
es sabida su faceta como “hijo de Dios”.
Para
terminar con este post, me gustaría escribir a título personal una reflexión
sobre este personaje. Y es que Jesús fue un gran hombre que generó una nueva
dimensión espiritual tras su muerte.
Que
lo más importante sobre su figura es el mensaje de amor y fraternidad que dejó
para la humanidad, un mensaje universal, reconocible y aceptado por todos,
creyentes o no, sin distinción de nacionalidad, raza o religión. Fue un mensaje
de fe que nos dejo como legado para posteridad. Los datos sobre su vida, figura, que fue verdad y que no poco pueden importar comparado con la esencia y
pureza de sus palabras. Jesús fue, es y siempre será un referente a la hora de comprender el vínculo divino entre Dios y nosotros.
Fiat Lux.
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